Juan Milla era un humilde trabajador de ls montañas de Aroa que se presume trabajaba en las famosas Minas de Aroa las cuales fueron propiedad de la familia Bolívar, siendo operadas hasta 1936 por compañías inglesas. Mientras Milla trabajaba, mantuvo una discusión muy acalorada la cual terminó en desgracia, Milla apuñaló al inglés causándole la muerte, este al ver la escena del crimen emprendió huida por las montañas de Aroa, mal herido llegó hasta lugar donde cuentan que reposan sus restos. Allí descansó un rato pero por la gravedad de sus heridas falleció. El cuerpo fue encontrado el 20 de diciembre de 1913.
Más allá de la capilla se levanta un monumento donde dicen que allí reposan los restos de Juan Milla, la
cual fue erigida por Pedro Torres y sus hijos por un favor recibido. Son muchas las personas que visitan el lugar, los pobladores del Candelo, Las Filas y las Cumaraguas son los principales custodios de este emblemático lugar. Muchas de las personas que frecuentan el lugar lo han tomado como sitio para practicar sus ritos de hechicería y muchas personas cuentan que en el lugar han visto apariciones de seres del más allá.
La naturaleza guarda en ella distintos misterios, las montañas son lugares vírgenes que muchos utilizan para realizar rituales entre otras actividades con gran carga energética, la capilla de Juan Milla no se ha salvado de ser un centro de brujería por lo que si llegas a visitarla, hazlo con respeto.